Si no tuvieras límites, ¿qué te gustaría hacer?; ¿Qué emprendimiento realizarías?;¿Hacia dónde dirigirías tu esfuerzo? Antes de continuar leyendo esta columna quisiera que hagas una pausa y trates de darle respuesta a estas preguntas.
Ahora bien, me gustaría preguntarte, ¿qué te impide lograr eso que tanto anhelas? ¿Qué te detiene? Muchas veces, lo único que impide que sigamos adelante con nuestros sueños, es el detractor o adversario interior que desde el coaching lo conocemos como “saboteador”.
Un saboteador, es ese pensamiento que muestra los peores escenarios o posibilidades que pueden darse frente a nuestros proyectos, con el fin de protegernos.
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Pero ¿Por qué tenemos en nuestro interior un detractor o un saboteador? La ciencia nos ha enseñado que nuestro cerebro crea procesos mentales de experiencias buenas y malas con el propósito de resguardarnos. Si bien es cierto, estos procesos mentales nos protegieron evolutivamente en el pasado, hoy en día ya no nos sirven porque nos paralizan.
Entonces, ¿Qué debemos hacer frente a estos saboteadores? Debemos aprender a identificarlos como pensamientos limitantes que se caracterizan porque tienden a mantenernos estáticos en nuestra zona de confort.
Infortunadamente, en esta “zona segura” no suceden cosas extraordinarias.
Entonces, cuando estemos de cara frente a nuestras metas y sueños, aprendamos a silenciar los pensamientos limitantes y a enfocarnos en trabajar por nuestros sueños y metas.
Nos seguimos.